La iluminación es un elemento fundamental en el diseño de interiores, ya que no solo permite la visibilidad, sino que también define el ambiente, resalta elementos arquitectónicos y mejora la funcionalidad de los espacios. En este artículo de DSIGNO te explicamos los cinco tipos principales de iluminación en diseño de interiores y sus aplicaciones. ¡Sigue leyendo!
Iluminación general
La iluminación general, también conocida como iluminación ambiental, es la fuente principal de luz en una habitación. Su objetivo es proporcionar una iluminación uniforme que permita ver y moverse con seguridad y comodidad.
Esta iluminación debe distribuir la luz de manera homogénea en todo el espacio, asegurando que sea funcional y suficiente para realizar actividades cotidianas sin esfuerzo visual. Las lámparas de techo, como las lámparas colgantes, plafones o lámparas de araña, así como las luces empotradas en el techo, son ejemplos comunes de iluminación general. Además, se utiliza en salas de estar, dormitorios, cocinas y baños.
Iluminación de tarea
Otro tipo de iluminación es la iluminación de tarea, que está diseñada para iluminar áreas específicas donde se realizan actividades que requieren un enfoque más detallado, como leer, cocinar o trabajar. Este tipo de iluminación proporciona luz concentrada en una zona específica y generalmente es más brillante que la iluminación general para facilitar tareas precisas.
Ejemplos de iluminación de tarea son las lámparas de escritorio ajustables que dirigen la luz directamente sobre un área de trabajo, luces bajo los gabinetes en cocinas para proporcionar iluminación directa en las áreas de preparación de alimentos y lámparas de lectura colocadas junto a sofás o camas. Asimismo, la iluminación de tarea es crucial en áreas de trabajo, estudios, cocinas y cualquier espacio donde se realicen actividades específicas que requieren buena visibilidad.
Iluminación de acento
La iluminación de acento se utiliza para resaltar características arquitectónicas, obras de arte, plantas o cualquier otro elemento decorativo que se desee destacar. Su propósito es añadir profundidad y enfoque visual al espacio, dirigiendo la luz a un punto focal específico y creando un contraste entre el elemento destacado y el entorno.
En cuanto a ejemplos de iluminación de acento, destacan las luces de riel con focos ajustables montados en rieles que pueden dirigirse a diferentes puntos de interés, focos empotrados en el techo queiluminan directamente objetos o áreas específicas y lámparas de pie que se utilizan para resaltar detalles decorativos o arquitectónicos. Se emplea en salones, galerías y entradas.
Iluminación decorativa
Otro tipo de iluminación es la decorativa, que es tanto funcional como estética. Su principal objetivo es añadir estilo y carácter al espacio, actuando como piezas centrales o complementos decorativos. Estas luces están diseñadas para ser atractivas y a menudo forman parte del diseño general del espacio, disponibles en numerosos estilos, tamaños y formas para adaptarse a diferentes gustos y temáticas.
Por ejemplo, son iluminación decorativa las lámparas colgantes en diversos estilos, desde modernos hasta vintage, lámparas de araña que ofrecen un toque elegante y sofisticado y lámparas de mesa y pie que además de proporcionar luz, sirven como elementos decorativos clave. Además, son ideales para salones, comedores y entradas.
En resumen, comprender y utilizar adecuadamente estos tipos de iluminación puede mejorar significativamente el diseño y la funcionalidad de cualquier espacio interior. La combinación de estos tipos de iluminación crea ambientes equilibrados, estéticamente agradables y eficientes. Y en el caso de que quieras profundizar en este tema, seguro que te interesa el Experto Universitario de Proyectos de Interiorismo de DSIGNO. ¡Infórmate sin compromiso!
